1.- El Partido SÍ IMPORTA.
“Hay que votar por la persona; no por el
partido”, se oye, ¿Acaso el candidato no comparte la ideología del partido?, si ha sido electo candidato, se encuentra muy cerca del núcleo ideológico, el partido
sabe que, ante todo, protegerá los intereses, principios y valores del partido. Una vez en el poder, se hará acompañar de un
gabinete y tendrá que responder a los grupos que le apoyaron en su
encumbramiento.
¿Conoces el
perfil del partido? ¿Es de derecha, izquierd a, socialista, comunista,
cristiano? ¿Histórica o doctrinalmente promueve la estatización o la inversión,
la familia, la pena de muerte, el aborto? VOTA POR QUIEN TÚ QUIERAS. Pero no seas
tan ingenuo como para pensar que el PRI no es el PRI, el PAN no es el PAN, el
PRD no es el PRD, el PT, Movimiento Ciudadano, PANAL no son lo que son.
2.- ¿Quienes son sus "Padrinos"?
NINGÚN candidato llega solo al poder. Todos llegan apoyados por
grupos políticos, sociales o empresariales. Y todos estos grupos exigirán a su
candidato cuentas una vez que gane la elección, y al candidato no le quedará otra que rendirles cuentas. Vota por quien tú quieras, pero hazlo sabiendo quién es su
familia, a quién trae detrás. Pensar que cualquiera de ellos viene solo y que,
una vez arriba, va a “romper” con sus padrinos, es difícil de creer. Vas a
votar por un candidato, su partido y su grupo. No hay otra opción.
3.- ¿Tiene Experiencia?